Una flor no necesita
espectadores para brotar,
ni público que emocionado
le diga lo bella que es...
Su belleza proviene de dentro,
de su propia naturaleza,
no se acomoda a la moda de los tiempos
y sólo sabe ser...
Una flor no necesita cronogramas
ni planes ocultos,
ni manuales detallados paso a paso
para abrir sus pétalos...
Como una sinfonía
fluye armónicamente
y en cada una de sus partes
la hermosura se construye...
Una flor no es eterna,
pues es justamente su fragilidad
lo que hace que su belleza
se perpetúe a cada instante...
Es casi como un recuerdo
que a veces viene a la mente
pero que ya se encuentra
habitando en los océanos del tiempo...
Una flor no es igual a la otra
y cambia momento a momento,
hoy resplandece y brilla en su belleza
y mañana ya no es...
Así nosotros,
hoy cantamos y bailamos
alrededor de la vida que tenemos
como efímeras mariposas buscando la luz...
Una flor no cambiará el mundo
pero para aquel que la vea
hará que su vida sea mejor,
al menos por un segundo...
Y con ello
ya habrá logrado mucho
y aunque después se marchite
el universo entero será un poco mejor...
Paz&Buena Energía
Pdta: Los invito a ver mis cuadros en isaacdevispintor.blogspot.com.co donde verán una hermosa MUJER DE COLORES
Isaac A. Devis G.
Te felicito por un poema tan intenso y tan hermoso.
ResponderBorrarMe ha encantado.
Un abrazo.
Uy bonito
ResponderBorrarUn inno delicato alla bellezza effimera che, proprio perché fragile, illumina l’anima per un istante eterno.
ResponderBorrarUn caro saluto
This is really beautiful!
ResponderBorrarBello poema. Hermosa flor. te mando un beso.
ResponderBorrarAsi es, que fina inspiracion, amigo. Muy bonita y sabia poesia
ResponderBorrarMe encantan las rosas y parece que hasta puedo oler su fragancia desde aqui.
Cordiales saludos y enviando un abrazo grande °º✿º° ✿♥ ♫° ·.✿⊱╮
Uno de mis hijos me trajo jazmines, su aroma inundo la habitacion, tu flor es el simbolo de todo lo bello que existe, un abrazo Isaac.
ResponderBorrarIsaac, tu verso nos recuerda que la belleza auténtica no depende de la mirada ajena. Como la flor que brota en silencio, también nuestras pequeñas victorias cotidianas tienen valor aunque nadie las aplauda. Gracias por recordarnos que la dignidad está en florecer, simplemente.
ResponderBorrarLas personas también podemos aprender y ser como las flores 🌈🌻.
ResponderBorrarHermoso poema