Pues sólo Tu,
Tu, que habitas en el silencio más profundo,
Tu, que hablas con eternas palabras de amor,
Tu, que eres el dueño de toda la sabiduría....
Sólo Tu y sólo Tu,
pides permiso para entrar a mi corazón,
tocas suavemente a la puerta de mi vida,
para poderme bendecir con Tu Santa Presencia....
Y es que sólo Tu,
Tu, mi Señor de la Luz,
Padre y Madre del Cosmos,
sólo Tu me amas con ese amor tan perfecto....
Y a Ti me entrego todo,
absolutamente, voluntariamente,
para decirte:
Toma el timón de mi vida y llévame a un puerto seguro....
A Ti, pues sólo Tu,
Rey de los reyes,
Altísimo, Bellísimo, Puro, Inalterable,
A Ti... dueño y Señor de mi vida...
Pues sólo Tu,
mi hacedor, mi sostén, mi norte...
sólo Tu sabes amarme
pues sólo Tuyo es mi corazón...
Y a Ti,
Dulcísimo Padre,
a Ti me rindo en forma incondicional
para que hagas de mi el ser que Tu quieres que yo sea...
PAZ&AMOR
Isaac