Si sopla el viento
o llueve,
si hace frío
o duele....
Si estás sólo,
o tienes miedo,
si estás abatido
o no quieres ver a nadie...
Sólo recuerda, recuerda,
que habitas, respiras,
tienes tu ser y tu esencia
en Aquel que todo lo puede...
Vuelve tu vista,
alza tus manos,
para recibir las bendiciones
a que tienes todo el derecho...
Pues los hijos del Eterno,
son iguales en dignidad y gracia que su Padre/Madre,
y la dicha y la gloria
son su herencia natural...
Así que seca tus lágrimas, abre tus ojos,
para disponerte a ser desde ahora,
feliz y libre,
como siempre lo fuiste aunque lo ignoraras...
Y que el Sol bese ahora tu rostro
y el alba luzca sólo para ti,
en el océano eterno
del rocío de tu paz...
Paz&Amor
Isaac